jueves, 27 de noviembre de 2014

ENCUENTROS

ENCUENTROS



Hace unos días despedimos los restos mortales de un joven talentoso de la iglesia. En aquella ocasión dije, como palabras alusivas, que la vida se trata de encuentros. Personalmente rendía homenaje a Dios que me permitió cinco  años de encuentro significativo y divino con aquel joven.

Mientras medito en estas palabras, pienso en que el Señor guía nuestro camino y en el transitar de su voluntad nos permite estos encuentros, a veces cortos o largos, lo importante es lo significativo que es para nuestro vivir y  lo que aportamos al otro. Creo que si fuéramos más conscientes de esta verdad, cuidaríamos detenidamente estos encuentros.

Para Josué encontrarse con Moisés fue un encuentro divino. Timoteo no hubiera dudado en responder positivamente en relación a su encuentro con Pablo. ¿Tus encuentros son solo ocasionales, significativos o divinos? Creo que el secreto está en nosotros. En la manera en que valoramos  e involucramos a Cristo en estos encuentros.

Alguien puede ser ocasional en tu vida pero tu manera de ver los momentos compartidos lo puede convertir en significativo. Es más, si ves al Espíritu Santo guiándote siempre, te darás cuenta que todo se convierte en divino según le des posibilidades a Dios. Ninguna persona pasa a tu lado casualmente sino causalmente. Solo permite al Señor mostrarte los porqués y usar tu vida tanto como la de los otros a tu favor.

La vida solo se trata de encuentros temporales hasta que llegue lo eterno.